Mundial

Cuando finalizó, muchos sintieron alivio. Cansados de las noticias deportivas y los resúmenes de los partidos, algunos canguros retomaron sus sobremesas de siempre. Medio dormidos, luchan ahora contra el sueño para no perder detalle de los documentales. Hoy han tenido suerte: toca uno de humanos.

Microrrelato escrito para el concurso Minificciones.com.ar. El texto debía hacer referencia a la imagen.

Turista

Le gustaba pasear por las iglesias de manera pausada, entreteniéndose en las capillas, observando todos los detalles. Cuando daba por finalizado su recorrido, solía sentarse detrás de algún feligrés especialmente devoto para escuchar su oración. Le divertía oír las plegarias, y con frecuencia tenía que frenar la necesidad de decirle “no tienes ni idea de lo que pides, el único demonio contra el que debes luchar eres tú”. Al final, siempre terminaba levantándose. Proseguía su camino por las calles, sin rumbo fijo, sin obligaciones. Después de tantos milenios disfrutando de esa forma de vida, no pensaba renunciar a ella.
Microrrelato escrito para participar en el concurso Minificciones.com.ar. El texto debía aludir a la imagen.

Pulsión

Las descendientes de Aracne olvidaron la lección. Conocedoras de los entresijos del arte de los telares, se afanan ahora por competir en el ámbito de la danza. Sin descanso, tratan de imitar y superar la belleza de los gestos de las bailarinas, ajenas éstas a esa lucha sin sentido. Mientras ensayan las figuras, sus rivales intentan hacer lo mismo en vano. Así pasan las horas, oscilando como péndulos envidiosos.
Microrrelato escrito para el concurso Minificciones.com.ar

Compromiso

Espérame“, le había dicho el tritón, y ella le prometió que lo haría. Sentada sobre una roca, lo siguió con la mirada hasta que ya no pudo distinguirlo. Mantuvo los ojos dirigidos hacia el lugar donde lo vio por última vez, convencida de que no tardaría en regresar junto a ella. Así esperó unos minutos, y luego unas horas que se hicieron días. La sal del mar le ayudó a cumplir su promesa. Petrificada, ya no podía hacer otra cosa mas que esperar.
Microrrelato escrito para el concurso Minificciones.com.ar. El texto debe hacer alusión a la imagen.

Amiatcompa

Tardaron mucho tiempo para encontrar la palabra que definiera exactamente lo que sentían. No encajaba bien en amor, ni tampoco en amistad. Era algo a medio camino entre una cosa y otra, pero no sabían nombrarlo. Atracción le quedaba demasiado estrecha, y hubiera sido injusto encerrarlo entre sus límites. Compañerismo les parecía muy fría, pasión un poco hueca. “Amiatcompa”, pensaron, “ésa es la palabra justa”. Estaban felices: ya tenían un término preciso que explicara la unión de ambos. Nunca pensaron que mientras tanto se había convertido en otra cosa.

Microrrelato publicado en En sentido figurado.

Todos los días de tu vida

A mí me empiezan a entrar dudas, y noto que todos me observan y se preguntan “¿a qué espera?”. El sacerdote mira al cielo mientras mi novio da media vuelta y se marcha al oírme decir: ¿me puede repetir la pregunta
Microrrelato escrito para participar en el concurso Relatos en Cadena. La frase de inicio debía ser “a mí me empiezan a entrar dudas“.

Espacio vital

Cuando camino por la calle, me divierte comprobar las distintas distancias corporales que marcamos sin darnos cuenta. Esto se nota especialmente en el transporte público. Por ejemplo, si eres el único pasajero y sube alguien, jamás se sentará a tu lado. De manera inconsciente, buscará un asiento libre que no esté demasiado lejos o excesivamente cerca. Es algo que he comprobado infinidad de veces, pero puedes hacer la prueba si quieres. Pues aún sabiendo que es totalmente imposible, siempre que la veo entrar espero contra todo pronóstico que se siente a mi lado.