Teología del día a día

Como los ángeles al caer el sol, así llegan sus hijos a casa los domingos por la tarde, después de pasar el fin de semana con su padre. Para ellos, él es Dios, así que a ella no le ha quedado otro remedio que identificarse de lunes a viernes con el demonio. Algún día entenderán que las cosas no eran como pensaban, y que en realidad sus padres vivían en dos purgatorios personales, hechos a la medida de sus actos. Pero aún falta mucho tiempo para eso. De momento, los niños están en el limbo.

Microrrelato escrito para participar en el concurso Relatos en Cadena. La frase de inicio debía ser “como los ángeles al caer el sol“.

20 comentarios en «Teología del día a día»

  1. Me ha gustado mucho, como utilizas elementos extranaturales para narrar un simple dia a día, o mejor, semana a semana. Muy bueno el final.

    Un beso infantil

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  2. Pues a mí también me ha gustado mucho. Y la frase de inicio era un reto complicado. Hoy se llenan los micro-blogs de ángeles ;).

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  3. Que doloroso el rol que nos toca a las madres, no?
    Todo para que ellos puedan seguir disfrutando del limbo que DEBE ser la niñez.

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  4. Duele un poco la madre-demonio y el padre ángel, pero he de decirte que no van a entender como eran las cosas tal como las piensa su madre…
    Es doloroso este micro y muy real
    Un abrazo Belén

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  5. Como la vida misma, te lo digo yo.
    Triste, pero real.
    Besos

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  6. Creo que lo principal de este relato es la identificación con él de muchos lectores que probablemente no tenga otra válvula de escape que la propia comprensión del conflicto. Gracias por acercarnos estas realidades. Un fuerte abrazo.

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  7. Juan: gracias! Espero no caer en un monotema, porque puede ser que el próximo esté en la misma línea… :o) Todavía no lo tengo decidido, así que igual cambio.

    Odile: qué bueno que te gustara. Gracias por tu beso infantil.

    Elisa: sí, los miércoles es lo que toca :o) la frase era complicada, pero es curioso como cada uno le ha dado una solución diferente. Me gusta este concurso por eso.

    Torcuato: la verdad es que no soy de andar mucho por las ramas :o)Gracias.

    Patricia: muchas gracias! Te digo lo mismo que a Juan, espero no caer en un monotema :oS

    Malena: gracias por venir por aquí, y muy bien apuntado lo del limbo: desde luego, la niñez debería ser así.

    Anita: yo creo en el poder nivelador del tiempo. Al final, todo vuelve a su sitio, o eso pienso…

    Su: qué pena que sea tan real como me confirmas…

    Maite: al contrario, gracias a ti por darle valor a la parte psicológica.

    Daniel: no pasa nada, a veces es bueno estar en el limbo, pero no te instales en él :o)

    De corazón, muchísimas gracias a todos por venir. Un abrazo muy fuerte para cada uno.

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  8. La redención de los padres llegará cuando crezcan, pero entonces será el momento en que los niños dejen de ser ángeles.
    ¡Qué bonito texto, Belén!
    Un abrazo.

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  9. Jesús: a ver si vas a estar en él… :o)

    Chula: sí, no se puede estar en el limbo siempre :o) gracias.

    Un beso para cada uno.

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  10. Yo si acaso, como mucho, en la parra…. pero de vez en cuando me dejo caer. El concepto de limbo lo introdujo San Agustin, y Benedicto XVI en el 2005 lo suprimio…
    Me andaría con ojo…. la guardia suiza ya tiene una foto tuya!!!!

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