Intentaba ser feliz de 17:00 a 18:00 horas, y jamás lo conseguía.
14 palabras
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Si un sí o un no pueden cambiar una vida, una historia puede ser contada en pocas palabras.
…o para leer sentado. Con música, o sin ella. En voz alta o en silencio. En cualquier caso, no te llevarán mucho tiempo.
Blog de aforismos
© BELÉN LORENZO 2018-24
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Cuadrar horarios es fácil, lo que no es fácil es cuadrar la felicidad.
¡Muy bueno, Belén!
Un saludo,
Gracias, Pedro! Para cuadrarla hace falta un equilibrio que a veces cuesta mantener (pero hay que intentarlo!).
Un abrazo.
La Felicidad llega cuando menos te lo esperas. Mucha crítica e ironía capto en tan pocas palabras.
O peor: la tienes al lado y no la ves!!
Un abrazo, Cybrghost.
A esa hora… ¡demasiado calor!.
Prueba mejor de 20:00 a 21:00 p.m. y date un margen por si acaso. En cuestión de felicidad, hay que atinar muy bien con el instante. Creo que no es eterna.
Besos felices.
Bueno, por lo menos estoy segura que de 7:00 a 8:00 cuesta bastante más que en cualquier otro momento del día. Algo es algo… :o)
Es cuestión de pararse y disfrutar, creo yo.
Un abrazo, Laura.
A la felicidad no se le pueden poner horarios, viene cuando quiere y del mismo modo se va. A veces está ahí y no nos damos cuenta, no la sabemos ver. Pero el reloj nunca le sienta bien.
El reloj no le sienta bien a casi nada…! :o)
Un abrazo, Puri.