Uno más uno, son dos.
Dos más uno, son multitud.
Tres más uno da lugar a un aparente equilibrio que se rompe si a cuatro le restas uno.
Tres menos uno es una soledad de dos.
El resultado de restar uno a dos, es siempre una incógnita.
Si un sí o un no pueden cambiar una vida, una historia puede ser contada en pocas palabras.
…o para leer sentado. Con música, o sin ella. En voz alta o en silencio. En cualquier caso, no te llevarán mucho tiempo.
Blog de aforismos
© BELÉN LORENZO 2018-24
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 España. Sitio web desarrollado por: JavierSebastian.es
