Pulsión

Las descendientes de Aracne olvidaron la lección. Conocedoras de los entresijos del arte de los telares, se afanan ahora por competir en el ámbito de la danza. Sin descanso, tratan de imitar y superar la belleza de los gestos de las bailarinas, ajenas éstas a esa lucha sin sentido. Mientras ensayan las figuras, sus rivales intentan hacer lo mismo en vano. Así pasan las horas, oscilando como péndulos envidiosos.
Microrrelato escrito para el concurso Minificciones.com.ar

Confidencias

Era un clon de la Bella durmiente“, comentaba siempre su madre entre risas, “de pequeña no hacía sino dormir“. Entonces ella intentaba disimuilar su enfado, porque le sentaba mal que contara esas pequeñas intimidades cada vez que le presentaba a alguien. Ahora, mientras la contempla sumida en un sueño del que no regresará, daría lo que fuera por volver a escucharla de nuevo.
Microrrelato escrito para participar en el concurso Imaginarte Minificciones en Cadena. La frase de inicio debía ser “Era un clon de la Bella durmiente“.

Dobles

Cada vez que llega a un lugar nuevo, le parece reconocer en los rostros de los extraños los rasgos de alguna persona conocida. De repente,  cree haber visto a un vecino en el metro, a una amiga mirando un escaparate o a un familiar lejano dando un paseo, pero siempre hay un detalle que le hace darse cuenta de su error. Y es que basta una mínima diferencia para romper el hechizo. Sin embargo, durante unos segundos aquella persona totalmente desconocida se convierte en alguien cercano, capaz de hacerle sentir más cómodo en un sitio nuevo. Cada vez que le pasa, no puede evitar sonreír pensando que a todo el mundo le ocurrirá algo parecido, y le divierte imaginar cuántos dobles de él mismo estarán aligerando la soledad de alguien en ese preciso instante, en lugares en los que tal vez nunca ha estado.

Perfiles

Todo el mundo sabía que era una mujer bala, o eso era lo que aseguraba en su perfil. Se definía como una ciudadana del mundo amante de los deportes de riesgo. Los seguidores de su blog, sin embargo, pensaban que debía ser mentira, y la imaginaban como alguien diferente a quien decía ser. Curiosamente, lo que no sospechaban es que ella tampoco les creía. Por eso, mientras preparaba todo lo necesario para hacer puenting, se reía sola acordándose de “Oficinista sin corbata”. Estaba segura de que detrás de ese nombre se escondía un trapecista sin red.
Microrrelato escrito para el concurso Relatos en Cadena. La frase de inicio debía ser “todo el mundo sabía que era una mujer bala“.